martes, 26 de mayo de 2009

¡Hoy no ... mañana tampoco!


¿Cómo entender la perdida del deseo sexual, cuando se es joven y todo lo relacionado con el sexo te atrae? ¿Cómo creer que un hombre puede perder el deseo sexual, de un día para otro? La respuesta a estas incertidumbres en las siguientes líneas de revista bacteria.
By Felipe Vegas


Lo cierto es que con el paso del tiempo y algunos factores externos, esta situación se produce, y con gente más joven de lo que uno cree. El mundo competitivo de hoy, las deudas, los problemas diarios, el estrés y la monotonía van matando día a día el atractivo de una vida sexual plena en pareja.

El estrés provoca en el hombre el aumento de la liberación de cortisol, situación que afecta las funciones orgánicas, y disminuye el nivel de testosterona. Es por esto que una de las razones para la perdida del deseo es el constante aumento del estrés en la sociedad actual.

Sin embargo, la realidad social del hombre actual no explica que en ocasiones la falta de deseo sea única y exclusivamente con la pareja estable. Esta situación no correspondería a un problema físico del hombre, ya que en ocasiones, al mismo tiempo un individuo puede tener respuestas favorables ante otros estímulos, como lo son: las fantasías sexuales, el deseo por otras mujeres y la masturbación.

Según la Organización Mundial de la Salud, esta patología se enmarca dentro de las disfunciones sexuales no orgánicas, con el nombre de Ausencia o Pérdida del Deseo Sexual Esta falta de interés por iniciar relaciones sexuales, desechadas las causas médicas o fisiológicas, se relaciona de manera directa con el estrés, el exceso de carga laboral y la incapacidad de afrontar la ansiedad, factores que unidos a la falta de comunicación en la pareja, explican lo inexplicable, que un hombre pierda el deseo sexual por una mujer.


By Felipe Vegas

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